1 de diciembre de 2008

UNIVERSIDAD Y CULTURA

Publicado en el Diario Útima Hora el 29 de noviembre de 2008

Los hechos culturales no son un fenómeno nuevo porque coexisten con la historia de la humanidad, son inseparables de la educación desde el seno familiar y resultan como fruto laborioso de las sucesivas generaciones.

¿Cómo explicar la sorprendente actualidad de la cultura en el lenguaje social de hoy?, es una pregunta hasta ahora sin respuesta de los estudiosos e intelectuales.

Mas de cien países han constituido Ministerios de la Cultura o creado instituciones con encargo de mantenerla y engrandecerla.

Y hasta la propia Iglesia Católica creó el 20 de mayo de 1982, por iniciativa de Juan Pablo II, el Consejo Pontificio de la Cultura.

Debe reconocerse que los hechos culturales no son un fenómeno nuevo.

Coexisten con la historia de la humanidad, son inseparables de la educación desde el seno familiar y resultan como fruto laborioso de las sucesivas generaciones.

Hoy las sociedades y las naciones advierten que su supervivencia gravita sobre los testimonios culturales, pero hallan deteriorada su identidad.

Saben que la persona, ante el desmoronamiento de la cultura -que le es a la vez herencia y conquista-, se encuentra privada de los derechos a ser y a existir dentro de domicilio conocido y acogedor y se siente como levitada y sin sustento espiritual.

Decía José Martí: “Es necesario ser cultos para ser libres”.

Y si la cultura es condición de la existencia de la persona, como lo afirma José Surukhan, cuando hablamos de culturas en peligro nos referimos directa o indirectamente a la destrucción de la persona como gente, como ser humano concreto e indivisible.

Por ello, la cultura, cuya importancia en los programas de Gobierno es casi nula y a la que una inmensa mayoría de la sociedad da las espaldas, hoy más que antes debe resultar un urgente imperativo en el quehacer universitario.

Y es que la Universidad, sin ser la única, desempeña papel protagónico en la función educativa y cultural de una sociedad cambiante a paso presto.

Prolijo y oneroso sería adentrarnos en las causas y evidencias de los cambios culturales que ocurren tan rápidos y sorprendentes en nuestros días.

Pero no podemos dejar de mencionar a los grandes agentes tecnológicos que afectan y modifican la cultura, tales como: la energía nuclear, la electrónica, la química, las macromoléculas artificiales o sintéticas, la astronáutica, la informática, la ingeniería biológica, entre otros.

Estas son causas de orden técnico que con variados y en ocasiones discrepantes modos influyen en el alma y en el cuerpo de la sociedad.

Están también los desasosiegos que por doquier se advierten en el mundo y que no siempre pueden declararse inmunes de estimular convulsiones sociales.

A simple modo de ejemplo tenemos: la impugnación juvenil a todo lo establecido; los movimientos pacifistas enfrentados con los terroristas y violentos; el desencanto de los sistemas sociales, políticos y económicos, incapaces de saciar el hambre de los pueblos y de causar suficientes fuentes de empleo y sustentación, pese a tantas promesas ilusorias; el fracaso de los tentadores pero equívocos modelos de desarrollo; la protesta porque la industria contamina el ambiente y destruye los recursos naturales que a la sazón hacen a la esencia del patrimonio de toda la humanidad; las justas reivindicaciones para que la mujer y las generaciones jóvenes entren de lleno en el gobierno de las sociedades y en la elaboración de la cultura, con efectos benéficos pero que afectan también al núcleo y raíz de toda sociedad, que es la familia.

En fin, la crisis de rancios valores éticos y morales rectores de los comportamientos individuales y colectivos debe ser abordada desde la Universidad y ésta tiene que abandonar su enclaustrada función para convertirse en iluminadora activa de la oscuridad que impone la ceguera que sufren quienes desde la política dominan las decisiones que terminan convirtiéndonos a los ciudadanos en individuos consumibles y desechables.

MEDIATIZACIÓN Y CAMBIOS SOCIALES

Publicado en el Diario Útima Hora el 15 de noviembre de 2008

De la post dictadura a esta parte nuestra sociedad vivió un proceso de mediatización acelerada, donde los medios audiovisuales ocupan un lugar central para la construcción de la idea que se tiene del mundo...

Nada es como era.

La sociedad hoy poco tiene que ver con aquella de dos décadas atrás.

Apenas dos canales de aire locales y otro, clandestino, antena casera mediante, nos permitía ver programas de la televisión Argentina a través de un canal formoseño.

El video cable ni pensar.

Significaba atacar al monopolio de las antenas parabólicas del entonces poderoso Coronel Gustavo Stroessner Mora.

Haciendo historia, era la época que en Paraguay sólo se informaban los que poseían nivel adquisitivo para comprarse una antena parabólica, mientras el resto de la población no tenía acceso a las cadenas de información permanente, ni a los canales temáticos de rock, deportes, turismo, documentales, dibujos animados para chicos, gourmet, entre otros.

La publicidad y el marketing no tenían tanta importancia, ni las encuestas ni los estudios sobre las necesidades y demandas de los consumidores.

Tampoco se habían producido los cambios urbanos que acompañan los cambios mediáticos: no existían los shoppings, ni los delivery, ni las estaciones de servicio fashion.

Casi nadie tenía computadora, Internet no existía y del fútbol se veía un resumen recién los lunes a la noche.

Los cambios fueron tan veloces y profundos que no resulta ironía afirmar que esa época realmente parece la prehistoria.

El arqueólogo que estudie esos cambios tendrá sin duda una certeza: los medios están en el centro de todas esas transformaciones.

Los medios hoy saben que ocupan un lugar privilegiado en la vida cotidiana, que generan corrientes de opinión, ideas y creencias sobre el mundo, y que muchas veces llegan incluso a reemplazar a otros actores sociales.

Y no sólo lo saben ellos, los espectadores también.

Estos lo aceptan de manera activa porque ya no mantienen una relación utilitaria sino que desarrollaron un vínculo de cercanía.

Dicho con otras palabras, no ven a los medios por la necesidad de estar informados ni lo miran para entretenerse un rato.

Muy por el contrario, mantienen una relación familiar afectiva, por momentos incluso empática, como cuando la televisión se muestra como representante de las necesidades de la gente.

De la post dictadura a esta parte nuestra sociedad vivió un proceso de mediatización acelerada, donde los medios audiovisuales ocupan un lugar central para la construcción de la idea que se tiene del mundo.

Y es así que incorporó como propios los valores que los medios transmiten: la inmediatez, la velocidad y la importancia de la imagen.

En Paraguay los medios audiovisuales iniciaron el camino hacía el mundo de la polémica, de la moda y del consumo, recién con el advenimiento de la democracia.

La aparición de los multimedios, la explosión del cable, la globalización de la información, la banalización del uso del “vivo y en directo” -hace 20 años el vía satélite era toda una proeza técnica-, la segmentación del público producto de los canales temáticos, son todos fenómenos típicos de una sociedad mediatizada.

La mediatización, obviamente generó controversias.

Para muchos intelectuales e investigadores fue un avance democratizador pero para otros, en cambio, es una de las caras de la globalización y de la pérdida de la dimensión crítica de la sociedad.

Por tanto, de una u otra forma, se vuelve imprescindible comenzar a entender los efectos de la mediatización y proponer un debate sobre esta cuestión.

Y es una deuda en la agenda de discusión intelectual.

11 de noviembre de 2008

TOLERANCIA Y ACCOUNTABILITY

Publicado en el Diario Útima Hora el 8 de noviembre de 2008

Un Estado que no socializa la gestión del gobierno, corre el riesgo de ser colonizado por los grupos más fuertes de la sociedad civil que no siempre resultan los mas representativos ni los mas comprometidos con el interés común.

No encuentro explicación a la absurda intolerancia de los sectores campesinos y grupos sociales al exigir soluciones rápidas a los ingentes problemas nacionales cuando el nuevo gobierno cuenta con apenas 86 días en el poder.

Estos grupos que se autodenominan “progresistas” nunca antes se manifestaron con tanta violencia en sus reclamos.

Son los mismos que toleraron 61 años de gobierno republicano.

Callaron, negociaron y sostuvieron durante más de seis décadas a una clase política que se encargó de vaciar las arcas, que cometió atrocidades contra los derechos humanos, que hizo uso y abuso de los bienes públicos, que envió al exilio político y económico a más de 4 millones de paraguayos, que abrió las puertas a advenedizos “banqueros” extranjeros que terminaron estafando a paraguayos quebrando fraudulentamente bancos e instituciones financieras.

Yo en lugar de tanto desatino, salvo que estén gestando la vuelta al pasado que muchos extrañarán, exigiría ahora rendición de cuentas públicas al gobierno saliente y dejaría trabajar con tranquilidad prudencial al gobierno del cambio histórico producido el 20 de abril de 2008.

Exigiría a Nicanor Duarte Frutos & Co. accountability, que significa “responsabilidad” en términos de transparencia y rendición de cuantas públicas.

Accountability, implica obligación de rendir cuentas y asumir responsabilidades ante los ciudadanos, impuesta a aquellos que detentan el poder del Estado.

Se refiere no solo a la premisa de rendición de cuentas sino además a la definición de los objetos sobre los cuales han de rendirse esas cuentas.

En este contexto, la rendición de cuentas a la sociedad implica no solo la obligación de todo Gobierno de mantener informados a los ciudadanos acerca de sus decisiones y acciones -por medio de canales de participación y control- sino también conlleva la posibilidad de que ello dé lugar a denuncias y sanciones.

También existe otra condición que se refiere a la imprescindible democratización del acceso a la información referida al sector público.

Es decir, que el Estado debe procurar arbitrar las políticas necesarias para poner en conocimiento de los ciudadanos sus derechos en su relación con la administración pública, como los canales e instituciones existentes para su ejercicio.

Asimismo, debe generar una información lo más objetiva y fidedigna posible.

Y en aquellas áreas técnicas cuya información resulta excesivamente compleja, es necesario que la misma sea traducida en términos de fácil comprensión para los ciudadanos.

Hasta ahora -que se sepa- el único informe que recibe la ciudadanía de la gestión de un gobierno es el que brinda el Poder Ejecutivo en ocasión del inicio de cada período anual parlamentario, por imposición de la Constitución Nacional.

Mientras que los Poderes Legislativo y Judicial nunca han rendido cuenta de sus actos a la sociedad.

Las relaciones y responsabilidades entre ciudadanos, políticos y burócratas redundará en un incremento del poder de la sociedad.

Un Estado que no socializa la gestión del gobierno, corre el riesgo de ser colonizado por los grupos más fuertes de la sociedad civil que no siempre resultan los mas representativos ni los mas comprometidos con el interés común.

Entonces, señores que dicen llamarse “progresistas”, pidan cuentas al gobierno saliente con la misma furia que pretenden que en menos de 90 días se solucionen todos los problemas no resueltos durante 22.265 días.

2 de noviembre de 2008

¡JUSTICIA!

Publicado en el Diario Útima Hora el 1º de noviembre de 2008

Se debe apuntar al cambio de la Justicia volviendo a los antiguos valores del respeto, de la educación, de la cultura, y de las obligaciones y no por el de la simple permuta de personas según los nuevos vientos políticos.

En una abarrotada sala de un tribunal del estado de Mississippi, EEUU, el jurado pronunció un veredicto totalmente inesperado: declaró culpable a una empresa química por realizar vertidos tóxicos en el sistema de conducción de agua potable de la ciudad, lo que ha provocado la incidencia de cáncer más alta de la historia.

La empresa inmediatamente apeló al Tribunal Supremo del estado, cuyos nueve jueces deberán confirmar o revocar la sentencia.

El propietario de la empresa al no confiar en que se emita un fallo favorable para sus intereses inició una investigación a la vida íntima de cada juez.

Y aprovechando que existe una vacancia en el Tribunal, decidió presentar su propio candidato, al costo de unos cuantos millones de dólares.

Entonces, contrató a una empresa para que le seleccione un abogado joven y maleable.

Y a este le financió su “lobby”, logró promocionarlo y moldearlo a su gusto y llegó a convertirlo en juez del Tribunal Supremo.

Dicho con otras palabras: Su juez del Tribunal Supremo.

Y con ello el empresario confirmó que la política siempre ha sido un juego sucio que ahora envuelve también a la Justicia.

Lo hasta aquí relatado resume una historia inteligente y una trama bien pensada de la última obra del novelista estadounidense y destacado autor de best sellers John Grisham (Jonesboro, 1955).

“La Apelación” tituló el autor a esta obra que sin dudas se convertirá en un clásico de nuestra era porque muestra directamente el alto riesgo de elegir a los jueces en una sociedad en la cual el dinero y el poder político lo decide todo aunque el costo sea la destrucción del pilar de la democracia: la Justicia.

En “La Apelación”, Grisham nos deja un claro mensaje al suscitar profundas dudas sobre como en el mundo hoy se concibe a la Justicia. Y así como la vida, la confianza se construye día a día y se diluye en un instante, también, como ella, se la valora cuando se advierte su ausencia.

Por eso la ausencia de confianza en la Justicia requiere de un pronto llamado al cambio de un sistema que ha subordinado el bien común general a los intereses personales de quienes manejan los hilos del poder.

Aquellos que deciden por nosotros, cuyas consecuencias nos afectan a la gran mayoría de ciudadanos que intentamos vivir con honestidad pero que terminamos siendo devorados por la mafia del poder fáctico que sostiene y financia a la clase política.

Las dudas sobre el origen legítimo de los fondos que financian campañas electorales son una de las muestras más representativas de esta lamentable situación que acrecienta la impunidad y la consecuente pérdida de confianza en la Justicia.

Ya lo dijo Nicolás Sarkozy al asumir la presidencia de Francia: “Hoy debemos volver a los antiguos valores del respeto, de la educación, de la cultura, y de las obligaciones antes que los derechos. Estos se ganan haciendo valer y respetar los anteriores” (sic).

O sea, debemos apuntar al cambio de la Justicia por las vías señaladas por Sarkozy y no por el de la permuta de personas según los nuevos vientos políticos.

De no ser así, la sociedad seguirá siendo culpable y el delincuente inocente.

Es hora que los administradores de las causas y juicios tomen conciencia que el respeto a las garantías de los que delinquen no pasa por una puerta giratoria para dejarlos libres.

Sin un giro mental el reciente cambio de gobierno pronto pasará a ser historia y podrá llevarnos a un mayor caos: el de la desesperanza.

Es así que este llamado a la reforma del pensamiento debe comenzar por la Justicia.

26 de octubre de 2008

Y LA VIDA SIGUE IGUAL

Publicado en el Diario Útima Hora el 25 de octubre de 2008

Al igual que cada año, se instaló una gigantesca cortina de humo que terminó relegando el debate público sobre el Presupuesto 2009, con lo que se evitó, una vez más, debatir a fondo acerca de los grandes problemas sociales.

El Presupuesto 2009 debió ser el primer y más importante examen para el nuevo Gobierno, o, mejor dicho, para “el Gobierno del Cambio”. Por lo menos en el Proyecto presentado por el Poder Ejecutivo debió quedar plasmado, en términos económicos, aquello que se pretende para el país en el plazo más corto; como también tuvo que contemplar en el aspecto social -el más castigado por el hambre y la pobreza- las políticas y planes estratégicos que urgen definir en materia de salud, educación, seguridad y crecimiento económico.

Sin embargo, como islas actuaron los responsables de las reparticiones públicas pidiendo gastar más y más. Es cierto, la necesidad es grande, los que se fueron luego de 6 décadas dejaron la caja vacía, sin embargo no puede un Gobierno que dice llegar para el cambio hacer a un lado el sentido de solidaridad y, sobre todo, de comunidad. Y -hete aquí- que llegó la crisis financiera que no debió tomar por sorpresa a los entendidos de la economía nacional porque el derrumbe de las bolsas se veía venir desde principios del nuevo milenio. Y, al igual que cada año, se instaló una gigantesca cortina de humo que terminó relegando el debate público sobre el Presupuesto 2009, con lo que se evitó, una vez más, debatir a fondo sobre los grandes problemas sociales.

Sin embargo, para otras cosas, se tuvo todo el tiempo del mundo. Hubo audiencia pública para decidir hacer el Rally del Chaco, el presidente Lugo justificó su veto a la ley “Lambaré vs. Asunción” en la falta de consulta popular. Los villetanos también protestaron porque no fueron consultados para instalar el vertedero donde van a parar las basuras lambareñas. Y paro de contar que tanto humo me ahoga en la cortina.

O sea, consulta y debate para cualquier cosa menos para la Ley económica más importante del país en plena crisis. ¿Será que algún miembro del nuevo Gobierno se habrá enterado que el 16 de octubre fue el Día Mundial de la Alimentación y que muy pronto pasará a denominarse Día Mundial del Hambre? Al respecto, el ex presidente de EE.UU., Bill Clinton, pidió a la comunidad internacional que deje de utilizar la crisis financiera mundial “como excusa” para evitar enfrentarse al aumento del hambre, porque a largo plazo, tan solo la autosuficiencia agrícola podrá ayudar a reducir el hambre en el mundo y evitar el riesgo de futuras dificultades financieras.

Si alguien sabe que esto llegó a oídos de algún miembro del Gobierno me avisan por favor. ¿Será que nuestros Gobernantes manejan informaciones como la del precio de los alimentos que están por las nubes, que su costo aumenta con una rapidez inusual, que ello se percibe en todo el mundo y que lo sufren sobre todo los más pobres? ¿Sabrán que el cambio climático y el incremento de la demanda de biocombustibles son parte del problema? ¿Se financiarán con el presupuesto 2009 actividades que respondan a políticas públicas de carácter social como prioritaria a cualquier otra?

Nos prometieron coches sin ruedas que volarían por encima de la calzada para ahorrar combustible, nos prometieron banquetes de dos píldoras en las que estaban condensados todos los nutrientes necesarios, nos prometieron robots inteligentes que nos facilitaran las tareas del hogar, nos prometieron que la vida nunca más sería igual. Y, al final, la vida sigue igual.

¡HAMBRE!

Publicado en el Diario Útima Hora el 20 de octubre de 2008

El aumento de los precios de la comida en el mundo, durante los dos últimos años, ha oscilado entre el 35 y el 70 por ciento, lo que ha conducido a que millones de personas no estén en capacidad de adquirir el mínimo básico para su nutrición.

Cerca de 930 millones de personas en el mundo sufren de hambre, de acuerdo con los informes divulgados por la FAO. Esto significa que en el último año ingresaron al club de los más pobres alrededor de 70 millones de personas adicionales. La razón de este incremento en el número de hambrientos en el planeta se debe al alza inusitada de los precios de la comida. América Latina también hizo su aporte a esta dramática realidad, al agregarle 6 millones de personas a la lista de pobres extremos, que ahora suman 51 millones, según cifras del Observatorio del Hambre de la FAO.

Ha quedado comprobado que cerca de 82 países no están en capacidad de autoabastecerse alimentariamente y dependen de las importaciones, las cuales están escaseando por dos razones esenciales: la primera, porque los países productores han restringido los negocios con el exterior para proteger la seguridad alimentaria interna y, segunda, porque los precios han subido exageradamente.

El aumento de los precios de la comida en el mundo, durante los dos últimos años, ha oscilado entre el 35 y el 70 por ciento, lo que ha conducido a que millones de personas no estén en capacidad de adquirir el mínimo básico para su nutrición. Incluso, los programas mundiales de asistencia alimentaria de emergencia han tenido que recurrir a donantes internacionales para evitar una reducción drástica en la cantidad de raciones que distribuyen diariamente alrededor del mundo.

Es importante recordar que existen cinco elementos que están atentando contra la seguridad alimentaria: 1) los alimentos se convirtieron en commodities bastante apreciados en la especulación bursátil; 2) hay un crecimiento de la demanda por parte de 650 millones de chinos, hindúes, mexicanos y brasileños que han visto multiplicar sus ingresos; 3) el cambio climático ha afectado las cosechas de cereales, leguminosas y granos; 4) subieron los costos de los fertilizantes; 5) muchas biomasas básicas en la alimentación humana se destinan para la producción de etanol.

Estas cinco variables han presionado al alza de los precios de la comida, lo que ha originado no sólo el regreso a la miseria de millones de personas, que habían logrado mejores condiciones de vida gracias a las políticas públicas orientadas al cumplimiento de los Objetivos del Milenio, sino que han acelerado la inflación en muchos países y contribuido a la crisis financiera que hoy afecta al mundo entero. Y aunque exista la mejor buena voluntad de trabajar en programas de seguridad alimentaria y de luchar contra el hambre, los recursos son bastante limitados y, por lo tanto, los impactos no son lo suficientemente fuertes para enfrentar con éxito esta crisis de carácter humanitario, que sólo es posible superarla con políticas nacionales que orienten gran parte de los esfuerzos y atención del presupuesto público, para vencer la miseria. Pero también es necesario que el sector privado asuma un papel mucho más protagónico.

Entonces, para las “cortinas de humo”, tales como: si se realiza o no el rally; los límites “históricos” de Lambaré y Asunción; la compra del avión presidencial; la definición de la presidencia de la ANR, entre otros temas baladíes, no existe mejor respuesta que las estadísticas. Y estas dicen que en el mundo el hambre sigue creciendo de manera abismal donde aproximadamente el 33% de los niños menores de 10 años tienen problemas de desnutrición global.

13 de octubre de 2008

LA PUBLICIDAD DEL ESTADO

Publicado en el Diario Útima Hora el 11 de octubre de 2008

Que este revés económico mundial no sea aprovechado para imponer la mordaza a periodistas y medios, con adjudicaciones dirigidas de espacios publicitarios del Estado.

El pasado sábado, en el programa Debate Abierto que se difunde por Radio Caritas, escuché una entrevista efectuada por su conductor Roque Acosta al dirigente campesino Alberto Areco. El periodista observó al entrevistado sus exigencias al nuevo Gobierno habiendo transcurrido apenas poco más de 30 días de su asunción.

Ello me llevó a reflexionar acerca de si necesariamente deben transcurrir 100 días para iniciar los cuestionamientos y reclamos. Pienso que en la ruta hacia los 100 días apenas se podrán vislumbrar señales, signos, ya sea del transito por el camino del cambio o hacia el atolladero del continuismo. Hasta ahora, particularmente, percibo más lo segundo. A simple modo de ejemplo están las promesas de cambio en cuanto a la transparencia de la administración y negociación de los bienes y derechos nacionales relacionados con las Entidades Energéticas Binacionales.

Y para muestra bastan no más de dos monedas prometidas: 1) cambios profundos en la administración, aplicación y control de los gastos sociales, y 2) el fin de la adjudicación arbitraria de los contratos de publicidad. En lo que hace a los gastos sociales, todo hace suponer que permanecerá igual en el aspecto formal, o sea, sin cambios. Su administración y aplicación, como desde antaño, estará fuera del alcance del Estado paraguayo y, por tanto, no integrarán las estadísticas, distorsionarán la economía y no se incorporarán al Presupuesto General de la Nación.

Con respecto a la política de adjudicación de espacios publicitarios, este medio de prensa se hizo eco en la semana de la arbitraria asignación de recursos a periodistas y conductores de programas, durante el mandato de Nicanor duarte Frutos, sin embargo entre el martes y el jueves pasado, los espacios televisivos cuyos conductores encabezaban el ranking de facturación durante la cuestionada gestión de Víctor Bernal al frente de Itaipú, volvieron a difundir apoyos publicitarios, esta vez de la Entidad Yacyretá. Todo esto en coincidencia con el discutido Acuerdo Constitucional otorgado por el Senado a los nuevos Directores de los Entes Binacionales.

Podrán justificar los responsables de la política comunicacional del gobierno aliancista que estos programas contaban con créditos por pagos adelantados o contratos en firme que cumplir. Sin embargo, en el caso de Itaipú, el 13 de mayo de 2008 esta Entidad comunicó a los medios que la vigencia de sus mensajes institucionales terminaban el 15 de mayo. También podrán aseverar que se trata de un nuevo estilo de difusión en los medios, con el apoyo de estas Entidades, bajo la denominación de "comunicación para el desarrollo".

Pero: ¿cuál fue el criterio para la distribución de los espacios y la adjudicación de las tandas? ¿ya ha sido contratada la Agencia que intermediará entre los Organismos del Estado y los medios, la contratación de los espacios? ¿cual será el criterio de adjudicación? ¿existe una política que garantice la transparencia en el proceso? Esto último es sumamente importante, más aún cuando se avizoran épocas de vacas flacas donde la crisis financiera mundial causará estragos y afectará sin dudas al mercado publicitario.

No sea que este revés económico mundial inesperado sea aprovechado para imponer la mordaza a periodistas y medios, con adjudicaciones dirigidas de espacios publicitarios del Estado, emulando a la nefasta política comunicacional instalada durante el Gobierno del ex presidente argentino Néstor Kirchner.

6 de octubre de 2008

ECONOMÍA DE PAPEL

Publicado en el Diario Útima Hora el 4 de octubre de 2008

Tanto en 1929 como en 2008, los especuladores instalaron un sistema financiero con mecanismos que apuntan a la concentración de renta y riqueza.

Para comprender lo que está ocurriendo con las finanzas a nivel mundial y su crisis actual es importante rememorar aquellos factores que alguna vez volvieron necesario el funcionamiento del mercado de valores para una movilización multiplicadora y efectiva de los capitales.

Es así como las bolsas de valores se crearon, fundamentalmente, para: 1) canalizar el ahorro hacia la inversión como contribución al proceso de desarrollo económico; 2) poner en contacto a las empresas y entidades del Estado, necesitadas de recursos de inversión, con los ahorristas; 3) conferir liquidez (dinero) a la inversión, de manera que los tenedores de títulos (papeles) puedan convertir en dinero sus acciones u otros valores con facilidad; 4) favorecer una asignación eficiente de los recursos, y 5) constituir el mejor instrumento de valoración de activos financieros.

Sin embargo, estas loables intenciones nunca eximieron a las bolsas de los riesgos de los ciclos económicos como tampoco de los fenómenos psicológicos que pueden elevar o reducir los precios de los títulos y acciones. Y es por esto que llegaron a ser consideradas barómetros de los acontecimientos económicos y sociales.

Fue así como el mercado bursátil mundial ha ido evolucionando hasta alcanzar niveles tecnológicos que permitieron a sus agentes operar desde sus oficinas, con lo que quedó en silencio el tradicional golpe del martillero para dar paso a la rueda informática, a través de redes de computadoras.

Hasta aquí todo bien hasta que llegaron los especuladores y timberos que degeneraron el negocio. Y en este contexto, la bolsa de valores de Nueva York, más conocida como Wall Street, ha contado con un crecimiento inusual así como desmedida fue la aparición de los especuladores que se aprovecharon de incautos compradores de acciones que depositaron cuanto tenían apostando a una economía mentirosa o de papel.

Los empresarios inescrupulosos, con sus cómplices agentes, corredores, contadores y auditores, inflaron los valores de sus negocios comerciando basuras en lugar de acciones, olvidando que la economía debe estar al servicio de la persona, dirigiendo su objetivo central hacia el lucro inmediato en los negocios con títulos públicos, monedas y derivados. Y es así que tanto en 1929 como en 2008, los especuladores instalaron un sistema financiero con mecanismos que apuntan a la concentración de renta y riqueza.

Entonces, cuan importante resulta desempolvar la Doctrina Social de la Iglesia que en su compendio DSI Nº 234 nos recuerda que “el objeto de la economía es la formación de la riqueza y su incremento progresivo, en términos no solo cuantitativos sino cualitativos: todo lo cual es moralmente correcto si está orientado al desarrollo global y solidario del hombre y de la sociedad en la que vive y trabaja. El desarrollo, en efecto, no puede reducirse a un mero proceso de acumulación de bienes y servicios. Al contrario, la pura acumulación, aún cuando fuese en pro del bien común, no es una condición suficiente para la realización de una auténtica felicidad humana” (sic).

Es tiempo de terminar con las mentiras de los economistas que nos venden un mundo de rascacielos vacíos presentándonos una “primavera macroeconómica” frente a un “crudo invierno” de pobres que ocupan cada vez más los espacios del mapamundi mundial.

26 de septiembre de 2008

EL RALLY Y LA CULTURA

Publicado en el Diario Útima Hora el 27 de septiembre de 2008

En la pelea por si se desarrolla o no la competencia automovilística chaqueña, los intereses económicos están por encima de los valores culturales.

La palabra Cultura deriva del latín colere, que significa "cultivar". La cultura nos da vitalidad, forma nuestro espíritu y nos proporciona un sentido. Está asociada con Culto, que implica un "dedicado apego a principios y creencias". En términos de comunidad, la cultura crea compromiso y lealtad a una causa común. Y es así como se forma el espíritu comunitario que no se legisla ni se impone.

Por eso, el cambio que el pueblo paraguayo requiere para asumir los desafíos y compromisos del nuevo milenio sólo llegará a través de una revolución cultural. Los interminables conflictos de intereses donde la dialéctica cede ante los insultos, donde la discusión acerca de la realización del Rally del Chaco, en lugar de ser abordada desde la perspectiva de su utilidad deportiva frente al probable daño al ambiente y a la conservación de los valores culturales, se lo reduce a un simple intercambio de improperios llevándola al terreno de una lucha de clases o de ricos contra pobres. Y esto revela una marcada ausencia de valores culturales.

Esta carencia de argumentos responde a una déficit cultural que vuelve vacío el debate. En las últimas tres semanas la competencia automovilística ocupó más espacios en los medios que las muertes por el desabastecimiento de hospitales. De igual manera ha opacado temas centrales como el presupuesto 2009 y la tozudez del ministro Borda por incorporar nuevos impuestos en lugar de buscar otras opciones para el mejoramiento de los ingresos tributarios. Camilo Soares y Alfredo Jaeggli desplazaron de los medios la atención a temas centrales como el de los escuálidos resultados en las gestiones de nuestras autoridades ante sus pares brasileños en la búsqueda de equidad en la gestión financiera y directiva de Itaipú.

Una vez más accedimos al podio de los países más corruptos de la región. A su vez, seguimos ausentes del mapamundi de la competitividad. La Justicia continúa sometida al poder político y a aquél que maneja el país desde la sombra. En fin, que un tema baladí como el rally chaqueño relegó el tratamiento y la búsqueda de solución de problemas que requieren urgente atención si se pretende emprender un nuevo derrotero hacia la prosperidad. Entonces, urge construir una política cultural.

Ello supone no sólo abrir el debate hacia los grandes aspectos de nuestra historia, sino incluir en la agenda oficial el problema de las culturas ancestrales. Es más, pensando desde una lógica mercantilista, una de las bases para construir una economía próspera es, precisamente, la diferencia cultural. Sin embargo, nada de eso se entiende debido a que el imaginario oligárquico sigue vivo.

Se continua pensando en la cultura como algo accesorio que siempre puede ser postergado en función de la alimentación y del trabajo. No se entiende que el desarrollo no sólo depende de la dimensión material, sino que hay otra dimensión, fundamental, que tiene que ver con la identidad y la pertenencia. Ni se comprende, por último, que la economía es un espacio estrechamente vinculado a la cultura. Y es por eso que en la pelea por si se desarrolla o no la competencia automovilística chaqueña, los intereses económicos están por encima de los valores culturales.

19 de septiembre de 2008

ARGUMENTUM AD HOMINEM

Publicado en el Diario Útima Hora el 20 de septiembre de 2008

La ausencia de debate y la falta de voluntad para elaborar el disenso ahoga cada vez más a la función pública de la política y nos aleja de la vivencia de una verdadera democracia.

Un argumento ad hominem o argumentum ad hominem, en latín, quiere decir “dirigido al hombre”. Es una falacia lógica que implica responder a un argumento o a una afirmación refiriéndose a la persona que lo formula, en lugar de apuntar al argumento por sí mismo. En nuestra fauna política lo podemos equiparar al calificativo que otorgó el senador Alfredo Jaegli al Secretario de Emergencia Nacional, Camilo Soares, a quien sindicó de “ministrito zurdo” porque este se refirió al controvertido rally del Chaco como un deporte de ricachones.

No debe de sorprender esta actitud del cuestionado parlamentario quien en épocas del stronismo y en los momentos más duros de la dictadura se divertía rompiendo autos con recursos provenientes de la fortuna familiar mientras la población indígena del Chaco era perseguida por las huestes del tirano quien sufría de xenofobia por estas comunidades buscando incluso su exterminio, según cuentan los historiadores de la época que tuvieron la valentía de relatar tales hechos.

Me hubiera gustado que el parlamentario rebatiera las afirmaciones del político del P Mas, explicando en que beneficia el rally al Chaco y, en especial, a las comunidades indígenas. Con su actitud, el señor Jaegli no hace más que aumentar los puntos en contra que pesan sobre una devaluada clase política. Su carencia de argumentos, su falta de ejercicio democrático para elaborar el disenso así como su no opción por el discurso para confrontar diferentes modelos de pensamiento, conspira contra una población hambrienta de debate político.

Estas actitudes distan bastante de quienes, como el senador Jaegli, se precien de ser representantes del pueblo. Políticos como el carecen de representatividad, siendo ésta falencia uno de los mayores obstáculos para el desarrollo de una verdadera democracia con libertad e igualdad. Y es así como ciertos o determinados factores de nuestra vida socio-política-económica actual nos insertan en un modelo no democrático. A su vez, en nada contribuye para superar las limitaciones de orden ideológico, político, económico, cultural, técnico y psicológico.

La ausencia de debate y la falta de voluntad para elaborar el disenso ahoga cada vez más a la función pública de la política y nos aleja de la vivencia de una verdadera democracia. Estamos viviendo momentos de cambios y, por tanto, la madurez debe ser la brújula de los elegidos para gobernar el país el pasado 20 de abril. Para eso hay que acabar con los showman y con aquellos que dicen llamarse liberales y en nombre de la libertad convierten al Gobierno en un laberinto libertino.

Cuan lejos esta este parlamentario de Manuel Gondra, Eligio Ayala, Luis A. Riart, José P. Guggiari, entre otros grandes prohombres del verdadero liberalismo paraguayo quienes no necesitaban alquilar bancas ni poseer fueros para ser reconocidos como verdaderos líderes y estadistas. Sin dudas, si pretendemos transitar hacia una verdadera democracia debemos mirar atrás y aprender de quienes construyeron nuestra historia con Justicia y libertad.

14 de septiembre de 2008

SECRETOS A VOCES

Publicado en el Diario Útima Hora el 13 de septiembre de 2008

La Administración de Puertos es apenas la puerta de entrada a otras dependencias estatales donde el atraco a las arcas públicas ha sido desde siempre mucho más voraz...

Quien no sabía en este bendito país acerca de las coimas y los sobornos que durante décadas han caracterizado especialmente a las operaciones realizadas en dependencias gubernamentales vinculadas con la percepción de tributos.

Con el tiempo esta práctica corrupta se ha extendido hasta los despachos de aquellos funcionarios que cajoneaban facturas para exigir al proveedor la aceptación de una deducción no documentada como condición para honrar la deuda pública.

Y si este se negaba a ceder una interesante porción de su propiedad y fruto de su trabajo, debía resignarse a esperar por los siglos de los siglos, hasta que la cuenta pasaba a sumar la interminable nómina de acreedores flotantes. Y para colmo el Estado se declaró inembargable a través de una ley a todas luces inconstitucional que terminó por empujar al vendedor a "negociar" una interesante suma para hacerse de un dinero de su propiedad.

Ni que hablar de la colusión entre oferentes y contratantes públicos en grandes licitaciones de medicamentos, obras viales y proveedurías por cuantías significativas.

Quien es el profesional contable o empresario que podría negar que en más de una ocasión ha sido tentado por los inspectores de Hacienda para “arreglar” y labrar acta blanqueando la situación fiscal del negocio previo pago de una interesante suma de dinero en concepto de coima haciendo figurar para el erario apenas la tercera parte de lo acordado.

Que lo diga un influyente miembro del flamante Gabinete quien ha sido uno de los pioneros de la grabación de un intento de coima con la valentía de hacerlo público en momentos donde todavía se tenía un gran temor por denunciar este tipo de tropelías.

Entonces, que no sorprenda la historia de los maletines porque lo denunciado es vuelto ... Sí, apenas dinero menudo, y la Administración de Puertos es la puerta de entrada a otras dependencias estatales donde el atraco a las arcas públicas ha sido desde siempre mucho más voraz.

Todo esto ha sido y sigue siendo un secreto a voces.

Simplemente debe investigarse a funcionarios aduaneros, portuarios, tributarios, fiscalizadores públicos, acerca de los bienes que poseen: vehículos lujosos en los que pasean esposas, amigas y amantes; embarcaciones de gran porte; residencias principescas, etcétera, etcétera.

Y contrastar con sus escuálidos ingresos “oficiales” según la nómina obrante en la Secretaría de la Función Pública y en el propio Ministerio de Hacienda.

Y un toque de atención para el nuevo Gobierno es que este sistema debe acabar porque con él se han cometido crímenes de lesa humanidad.

Esto es así porque la corrupción ha devorado hospitales, ha impedido dotar a los Centros de Salud públicos de camas para terapias, de incubadoras, de rubros para personal médico y paramédico, de ambulancias, en fin, de lo que se privó al pueblo matando vidas.

También este devorador e insaciable atraco a los bienes públicos no permitió la formación y el acceso a una educación libre y gratuita.

O sea, generó una sociedad de excluíos, de jóvenes hambrientos de conocimiento, de saber y de cultura.

Por todo esto, si el nuevo Gobierno aplica implacablemente todo lo que le faculta la ley contra los que se enriquecieron impúdicamente vaciando el país y asesinando ciudadanos, habrá dado un gran paso en sus primeros cien días.

Luego, a través de la Procuraduría, la Contraloría y la Fiscalía, deben recuperarse los bienes mal habidos y aplicar en beneficio de los más desposeídos.

Si el Gobierno así no lo hiciere, no sólo el pueblo se lo demandará sino que se convertirá en cómplice y encubridor.

5 de septiembre de 2008

GOLPE DE ESTADO MENTAL

Publicado en el Diario Útima Hora el 6 de septiembre de 2008

El cambio de conciencia es un paradigma necesario para lograr la reconversión de un país minado por la cultura de lo torcido.

Antes de la asunción del nuevo Gobierno asistí invitado por el entonces ministro de Planificación, a un taller de estrategia sobre educación para la competitividad. El objetivo central que convocó a 15 técnicos y especialistas en educación era el de evaluar la situación actual de la educación paraguaya, con sus luces y sus sombras, para luego diseñar líneas de acción que permitan proponer cambios para mejorar la competitividad mediante la revisión de ciertas políticas educativas. También analizamos la factibilidad de las propuestas en la medida que iban surgiendo, terminando en una interesante y coloquial tormenta de ideas.

Ya cuando estábamos camino a levantar la sesión se me ocurrió plantear un “un golpe de estado mental” como única salida factible para poner en práctica tan interesantes e innovadoras propuestas. Y fue así que distraje al auditorio por un par de horas más. Es que el cambio de conciencia es un paradigma necesario para lograr la reconversión de un país minado por la cultura de lo torcido. Viejas prácticas y costumbres permanecen. Y los cambios como señal de mejora se harán esperar.

Han quedado atrás 61 años de un sistema donde lo anormal se hizo normal, donde el pecado se convirtió en pureza, donde la denuncia era signo de delincuencia, donde el delito se volvió racional ... en fin, donde todo vale. Entonces me puse a pensar y logré encontrar una respuesta a tantas incoherencias ... ¡los paraguayos requerimos de un perentorio golpe de estado mental que cambie nuestra conciencia! No me quedan dudas. Y cuando me refiero a ello apunto a la educación de las grandes masas populares.

Emulando a Freire afirmo que la educación es la única arma que tenemos para luchar y que nos brindará una verdadera libertad. Esto es así porque ella no es neutra pues responde a situaciones históricas determinadas y a condiciones económicas dominantes. Y me refiero a una educación que no debe ser una mera reproducción de las bases del sistema.
Voy más allá y apunto a una educación que invite a reconocer y descubrir críticamente la realidad. Una educación que no se remita solo a la formal sino que abarque todos los ámbitos de la vida porque la vida es un educar permanente y por tanto educación es política. No debe quedar fuera de este análisis lo erróneo de limitar la formación de la persona a la educación escolar, sin ampliar al ámbito mundano, guiada principalmente por la forma de convivencia de la persona como sujeto fundamental del quehacer ciudadano.

El cambio de conciencia requiere de una revolución cultural que precisa de un golpe de estado mental. Si cada uno de nosotros no producimos esta reconversión, difícilmente lograremos la libertad y la igualdad para vivir en democracia y superar nuestras inequidades. Y es que no todo pasa por la educación, también los cambios provienen de los golpes y si queremos ser competitivos el nuevo Gobierno está llamado a provocar esa revolución anhelada hace 61 años y esperada por más de seis décadas.

Los golpes de estado no siempre apuntan al derrocamiento del poder político, a veces son necesarios para destituir a un poder mental obsoleto de modo a que modele el pensamiento.

2 de septiembre de 2008

ECONOMÍA EN TRANSICIÓN

Publicado en el Diario Útima Hora el 30 de agosto de 2008

El panorama es muy incierto y un triunfo demócrata o una victoria republicana parecen no escapar del problema financiero derivado de la crisis de las hipotecas.

Globalmente, en lo que va de 2008, la economía ha crecido en la región pero acechan muchas incertidumbres que algunos economistas han decidido llamar “situaciones de transición”. La crisis de las hipotecas subprime en Estados Unidos y su extensión a algunos países de Europa- préstamos que tienen un tipo de interés bancario mayor que el tipo de interés preferencial y que no cumplen las directivas de las principales compañías que cotizan en bolsa patrocinadas por el Estado para brindar financiamiento al mercado de la vivienda-; las elecciones presidenciales norteamericanas; la continuidad de China como motor del crecimiento; la agflation o aumento en el precio de los alimentos que se produce como resultado de un incremento de la demanda de productos de consumo humano como maíz, girasol, caña de azúcar, soja, entre otros, y su uso como alternativa de combustibles; el precio del crudo; la relación euro-dólar ... son algunas de las causas de esta “economía en transición”.

Algo así como que todo está bien en cuanto al crecimiento económico pero nadie se anima a navegar porque avizora una marea con pronóstico reservado sobre los países del tercer mundo, en el inmediato plazo. Quizá la principal causante de tal incertidumbre sea la propia economía norteamericana marcada profundamente en 2008 por la transición. Estructuralmente, la suba del precio del crudo y la agflation siguen siendo una amenaza para las economías desarrolladas. En tanto, la crisis en Wall Street no se detiene y la marcha de la economía norteamericana se presenta cada vez más fluctuante a la espera de la resolución de las elecciones presidenciales, por el momento muy inciertas.

La crisis de las hipotecas subprime, su impacto sobre el sistema financiero no cesa y los nuevos datos de la economía no ayudan. La inflación mayorista se halla en crecimiento y la caída de la industria de la construcción ha alcanzado niveles record en los últimos 17 años. Y en medio de la crisis de los bancos y entidades financieras, la relación dólar/euro se ubica en 1.47 con una ligera tendencia a la apreciación del dólar. Sin dudas, que la economía mundial se halla actualmente transitando entre la lucha contra la inflación, que afecta especialmente a las economías emergentes y en desarrollo, pero también a las avanzadas, y la necesidad de frenar la demanda en muchas economías avanzadas.

Además, para el FMI, la inflación de las economías desarrolladas seguirá creciendo en 2008, para desacelerarse en 2009 por la menor demanda global. El panorama es muy incierto y un triunfo demócrata o una victoria republicana parecen no escapar del problema financiero derivado de la crisis de las hipotecas. Esta realidad no debe dejar de ser observada por el equipo económico en el Gobierno y, a su vez, debe ser foco de atención del parlamento sumergido en una de sus peores crisis en lo que va de la transición porque más temprano que tarde tendrá sus efectos negativos en nuestra ya maltrecha situación económica y social. Pero como me decía el conductor de un taxi el pasado jueves -opinando sobre el actual conflicto político- “esto es un circo señor donde los payasos nos cobran precios muy caros para entrar al espectáculo”.

25 de agosto de 2008

LUCES Y SOMBRAS

Publicado en el Diario Útima Hora el 23 de agosto de 2008

“Lugo Presidente” ¿es la consecuencia de un largo trabajo, hábil y estratégico, de un equipo pensante y conocedor del ajedrez político?

En 2005 el periodista Roberto Paredes publicó en este diario una serie de fascículos a los que tituló “Post-Stronismo: Luces y Sombras”. En el Capítulo 27 del material encontré algunas afirmaciones que me llevaron al recuerdo no solo de las sombras del pasado sino que me sentí encandilado por unas potentes luces con las que hoy veo con claridad lo que hace más de tres años eran simples predicciones o meras expresiones de deseos. Y, salvo que el referido periodista haya estado revestido de poderes sobrenaturales de clarividente, éste afirmaba que “hay sectores políticos de izquierda y de avanzada como movimientos sociales organizados, que ven a Fernando Lugo como el líder ideal para encabezar un proceso de transformaciones socio-económicas en el Paraguay, de donde se apuesta a convencer al obispo de que sea el candidato a presidente de la República para las elecciones del 2008” (sic).

Cualquier semejanza con la actual realidad ¿habrá sido pura coincidencia? Dicho con otras palabras, “Lugo Presidente” ¿es la consecuencia de un largo trabajo, hábil y estratégico, de un equipo pensante y conocedor del ajedrez político? Dejo picando la pelota a ver quien se anima a patearla primero. De confirmarse esta hipótesis, ¿fuimos todos los que estuvimos en la plaza el histórico 29 de marzo de 2006 engañados con el discurso de Fernando Lugo quien se presentó como un factor de unidad de la oposición para vencer al continuismo, para generar el cambio y gritar ¡Dictadura Nunca Más! hasta quedarnos roncos?

En otro pasaje del fascículo, Paredes se refiere a algunas actitudes de Lugo como el apoyo a las posturas más progresistas con respecto a la deuda externa y al firme rechazo al “impuestazo” que entonces estaba siendo promovido por Dionisio Borda, a la sazón ministro de Hacienda de Duarte Frutos. Hoy con “Lugo Presidente” y con el mismo ministro de Hacienda, se apunta a la idéntica fórmula bajo la muy cuestionada excusa de que Paraguay es el país con menor presión tributaria de la región con apenas el 11% sobre el PIB.

Pero olvidan, Lugo y Borda, que un informe de la OEA señala que el 80 por ciento de la recaudación impositiva en el Paraguay va a parar a bolsillos de corruptos y que sólo el 20 por ciento de lo recaudado se utiliza para los fines previstos. Y hasta fue invitado con honores por el nuevo Gobierno, nada más y nada menos que Joseph Eugene Stiglitz, Premio Nobel de Economía 2001, para convencernos que debemos incrementar nuestra presión tributaria, como si un Nobel, con todo el respeto que se merece el susodicho, fura portador de la varita mágica para solucionar los problemas del país y del mundo con las “mejores recetas”.

Pues de ser así, el ciudadano planetario no estaría cada vez más pobre y desigual ni observaría cual mendigo la inequidad en la distribución de la riqueza, tampoco el cáncer seguiría buscando cura y los clásicos de la literatura universal serían premiados por la excelencia de sus obras más que por sus corrientes políticas e ideológicas. Gracias a mi amigo Antonio, quien me ayudó a desempolvar viejos archivos en un país de flaca memoria, les hago esta entrega que por ahora trasluce ausencia de principios y afirmaciones coyunturales.

15 de agosto de 2008

DESPERTAR

Publicado en el Diario Útima Hora el 16 de agosto de 2008

El gobierno aliancista debe hacer aquello que está pendiente y que las administraciones que transcurrieron desde el 4 de febrero de 1989 no han tenido voluntad ni agallas para encararlo.

Ayer vivimos uno de los acontecimientos más emblemáticos en la historia del Paraguay. Han quedado atrás más de seis décadas de tiranía, opresión y abuso de poder. Asumió un gobierno de signo político diferente. Ayer el mundo posó su mira en este diminuto país, perdido en el planeta, más conocido por sus glorias deportivas y por sus gobiernos protectores de roscas mafiosas.

Hoy despertamos con la esperanza de un país distinto, con la fe puesta en el cambio. Hoy ese mundo eclipsado en este corazón de la América sureña ha dejado de observarlo porque volvió a lo suyo, a lo cotidiano. Hoy no es ayer pero podrá ser mañana. Hoy comienza un camino que trillaremos sólo los paraguayos y extranjeros que queremos reconvertir este país.

Y aquellos que han puesto sus ojos en esta tierra de jazmines y azahares, con más curiosidad que interés, volverán a observarnos siempre que reciban señales de cambio. El compromiso es grande y la pesada mochila cargada de deberes no debe ser llevada únicamente por los que juraron cumplir con la Constitución y la Ley. Es la sociedad civil que con su poder soberano de contralor público tendrá que acompañar cada acto, cada gesto y cada decisión del gobierno aliancista, de modo a aprobarlo o cuestionarlo.

Y es que quienes tienen la responsabilidad de conducirnos, humanamente pueden equivocarse y lo harán, tendrán tropiezos y muchas piedras y cáscaras de bananas los están esperando. Se golpearán y resbalarán tantas veces como quieran. Son golpes y caídas que al comienzo duelen pero que pueden terminar gustando. Y es aquí cuando el poder ciudadano deberá ejercer presión para las correcciones antes que los resbalones terminen por convertir una simple pista de patinaje en otra de aterrizaje forzoso. Fernando Lugo Méndez y todo su equipo necesita del apoyo de esa sociedad que apostó al cambio un no menos emblemático 20 de abril de 2008.

Requiere de una sociedad crítica que lo cuestione antes que lo aplauda; que no le entone el himno que le gusta oír, que ponga freno a los desmanes propios del poder. A su vez, el gobierno aliancista debe hacer aquello que está pendiente y que las administraciones que transcurrieron desde el 4 de febrero de 1989 no han tenido voluntad ni agallas para encararlo.

Tendrá que exigir la recuperación de los bienes malhabidos durante el gobierno de la dictadura y con ellos indemnizar a sus víctimas. Las tierras repartidas entre civiles, políticos, militares, amantes y serviles, -“disfrazados” de agricultores- tendrán que ser recuperadas y otorgadas a los campesinos a condición que la trabajen. También deberán rescatarse aquellas que bajo el manto del populismo se han repartido entre campesinos que la revendieron una y tantas veces.

Tendrá que separar de la magistratura a los que pudiendo no hicieron Justicia y sumisamente se sometieron a los demás poderes del Estado. En fin, mientras la noche estrellada del 15 de agosto de 2008 se despedía, como huyendo del rey sol, hoy despertamos en la misma patria de Augusto Roa Bastos, esa de la que -según el escritor- se enamoró el infortunio ¿Será una patria nueva? … Todavía no lo sé, esperanza me sobra pero confianza me falta. Esta la iré comprando en pedacitos siempre que me den lo que me ofrecieron, que el precio a pagar sea justo, y, sobre todo, que esté a mi alcance ¡Salud Paraguay…que ni opresores ni siervos alientan donde reinan unión e igualdad!

ESTADO Y SOCIEDAD CIVIL

Publicado en el Diario Útima Hora el 9 de agosto de 2008

La participación de la sociedad civil es el mecanismo más relevante para evitar abusos, lo que implica un compromiso permanente por la democracia.

El sábado pasado sostuve que nuestro país necesita reconvertir su estado en uno que sea moderno y eficiente así como fuerte y limitado. A su vez, mencioné como condición la existencia de ciertos elementos básicos a saber: visión estratégica, consensos sobre políticas de largo plazo, independencia de los grupos de presión, prevalencia de las reglas por sobre la discrecionalidad, fomentar la subsidiariedad-participación, excelencia de la función pública y la lucha contra la corrupción.

Un primer punto a tener en cuenta es la visión estratégica acerca de qué funciones el estado debe asumir, cuáles incentivar y cuales delegar. Ello indefectiblemente llevará a una discusión que debe estar lo suficientemente alejada de cualquier ideología anteponiendo el bien común. Esto es así porque el diseño de la visión estratégica en la búsqueda de un estado moderno no podrá evitar la confrontación ideológica.

De ahí que se vuelve ineludible apelar a la capacidad de los grupos de intereses para que balanceen sus acciones. Para ello resulta necesario revisar las estructuras institucionales en búsqueda de un diseño, ya sea voluntario como espontáneo, en el que se puedan tener en cuenta aspectos inherentes a participación-gobernabilidad, decisiones prudenciales-consenso, contrapesos-cooperación, entre otros. A su vez, debe primar un sano espíritu de descentralización que respete las esferas inferiores de poder.

En cuanto al tema de la necesidad de prevalencia de las reglas frente a la discrecionalidad, deben existir reglas y pautas de comportamiento. Estas se diseñan más bien externamente y enmarcan la conducta de los agentes sociales y servidores públicos. Ahora bien, un sistema de puras reglas no parece adecuado para resolver los problemas reales en tiempo real, mientras que la discrecionalidad deja un margen abierto para la corrupción y las conductas arbitrarias.

Por tanto debe buscarse una síntesis entre cualidades en los sistemas que podríamos denominar de discrecionalidad acotada, donde la mayor parte de las decisiones quedan sometidas a reglas mientras que se mantiene un cierto espacio para la decisión individual con respecto a los casos más importantes. Otro elemento fundamental consiste en el objetivo general de la descentralización y la participación.

La estructura institucional debe estar fundada en la subsidiariedad. Esto implica un compromiso para que el proceso de toma de decisiones sea descentralizado y transparente, de abajo hacia arriba. La descentralización de funciones en base al principio de subsidiariedad atiende a que las mismas se ejerzan en el nivel de gobierno más cercano posible a los ciudadanos.

De este modo, se facilita la participación, tanto para la identificación de las necesidades como para la generación de responsabilidad propia. Y es así como la sociedad civil se constituye en el mecanismo más relevante para evitar abusos, lo que implica un compromiso permanente por la democracia, la ampliación de espacios de participación y de los lazos espontáneos de la comunidad. Y, en definitiva, es lo que da sentido a las relaciones entre el gobierno y la sociedad quien es la última autoridad de control público.

ESTADO MODERNO

Publicado en el Diario Útima Hora el 2 de agosto de 2008

Un estado moderno debe ser fuerte para sostener su independencia de los diversos grupos de presión pero limitado para no excederse ni abusar en las funciones que desempeña.

A escasos trece días de la asunción de un nuevo gobierno los elegidos aún no han hecho saber al pueblo cual será el modelo de Estado que pretenden gobernar. Hay muchos, entre quienes me incluyo, que sueñan con un Estado moderno y eficiente. Este se caracteriza porque atiende eficazmente las necesidades de los ciudadanos generando adhesión al mismo.

Si bien aún prevalece la postura que asocia el sector privado a la eficiencia y el sector público con lo opuesto, las experiencias ponen de manifiesto que las reformas económicas resultan más beneficiosas en países donde el estado es fuerte pero concentrado en las tareas de su específica incumbencia. Esto lleva a replantearse el rol del estado como promotor y regulador.

El marco legal y regulatorio debe encuadrar el funcionamiento del mercado. Incluye la lucha frente a los delitos económicos y la política de defensa de la competencia. La seguridad jurídica es necesaria para la confianza humana, la cual a su vez es un ingrediente esencial. Los extremos opuestos a un estado moderno son: 1) el estado cooptado por grupos de interés específicos, que tiene claro su fin porque es muy estrecho, pero deja de lado las demandas de la mayoría de la población y, 2) el estado arbitrario, muy común en nuestro continente, que consiste en adaptarse automáticamente al impulso personal del gobernante de turno, especialmente cuando está rodeado del aura de la autoridad concentrada y la retórica demagógica.

De este modo y por contraposición se llega a la conclusión de que un estado moderno debe ser fuerte para sostener su independencia de los diversos grupos de presión pero limitado para no excederse ni abusar en las funciones que desempeña. Asimismo, la definición y la estructura del estado moderno, fuerte y limitado, requiere la existencia y el impulso de ciertos elementos básicos fundamentales. Estos son: visión estratégica, consensos sobre políticas de largo plazo, independencia de los grupos de presión, prevalencia de las reglas por sobre la discrecionalidad, fomentar la subsidiariedad-participación, la excelencia de la función pública, y la lucha contra la corrupción.

Dado que el rol del estado está constituido de funciones, acciones y tareas que se hacen efectivas a través de períodos de tiempo prolongados, también resulta fundamental la estabilidad de las políticas que le sirven de base. Por tanto, para lograr un estado moderno, fuerte y limitado, es necesario partir por establecer la importancia de instituciones sólidas y transparentes, fundadas en el imperio de la ley, la lucha contra la corrupción, y la constitución de un marco de competitividad.

Asimismo, es importante la estabilidad política, la eficacia del gobierno, la calidad de las regulaciones, el estado de derecho, y ampliar la participación de la ciudadanía. Quizá Fernando Lugo Méndez y su gabinete lo tengan claro, mas pregunto ¿ustedes amigos lectores saben que hará el piloto de esta tierra de jazmines y azahares a partir del 16 de agosto? Yo no lo sé, pero me tranquiliza que ya se tendrá al capitán de un barco a la deriva desde el 21 de abril de 2008.

EXTERMINIO PLANETARIO

Publicado en el Diario Útima Hora el 26 de julio de 2008

El planeta se está calentando y una de las causas es la acción depredadora del modelo productivo que utiliza la sociedad.

No le encuentro sentido acumular tanto poder cuando el tiempo acaba y no te permitirá disfrutar de lo que con él cosechaste. Aunque parezca una frase repetida vivimos en un mundo de inequidades.

Por eso no debe sorprender que el gran acontecimiento de la reunión de los gobernantes pertenecientes al G8 en Toyako, Japón, fue la publicación de una foto de Ángela Merkel, George W. Bush, Yasuo Fukuda, Nicolas Sarkozy y Dimitri Medvédev, plantando árboles. Y esto es así porque el tema central que los llevó a la cumbre fue el cambio climático, mas apenas hubo discursos y ningún acuerdo de solución. Por tanto, patearon para el 2009 definir que nivel de compromiso tendrán las naciones desarrolladas en el mediano plazo en lo que se denomina el nuevo pacto Pos-Kyoto cuya negociación está a cargo de la ONU.

Ya no cabe duda razonable ni científica: el planeta se está calentando y una de las causas es la acción depredadora del modelo productivo que utiliza la sociedad. Atrás quedaron los científicos asalariados de las multinacionales del petróleo y la industria química, encargados de sembrar dudas y desacreditar las conclusiones de estudios relacionados con el origen del aumento de la temperatura mundial.

Hoy los gobiernos aceptan que la tierra está empezando a sufrir las consecuencias de bruscas modificaciones del clima y de cambios en el régimen de lluvias. Millones de habitantes son conscientes que el nivel del mar está ascendiendo peligrosamente y que de seguir este comportamiento por lo menos 35 países se verán afectados en una primera fase y no menos de 250 millones de personas resultarán damnificadas y, de ellas, alrededor de 90 millones podrían convertirse en refugiadas ambientales.

A pesar de toda esta evidencia científica, ambiental y social, las acciones públicas para actuar en contra de un mayor calentamiento global, son exageradamente lentas y no figuran en el primer plano de las urgencias gubernamentales. Y los ciudadanos del mundo deben saber acerca de los peligros que se ciernen sobre ellos por un aumento acelerado de la temperatura pero no reaccionan. Y es que el origen de esta pasividad cívica se encuentra en el supuesto de que las acciones gubernamentales se iniciarían con recortes drásticos en el uso de energías y millones de personas no están dispuestas a dejar fácilmente su comodidad o a abandonar las tendencias del consumo para lograr que el calentamiento futuro se reduzca. Sin embargo, si bien los afectados son los países ricos y pobres, no lo son por igual.

Un ejemplo espeluznante lo trae el Informe sobre Desarrollo Humano del PNUD, en el que se asegura que el Reino Unido invierte 1.200 millones de dólares anuales en protección de inundaciones, mientras los habitantes de los Países Bajos compran viviendas con tecnología que les permitan flotar, los inversionistas de los Alpes están elaborando nieve artificial para garantizar la industria del esquí y, entre tanto, en el Cuerno de África, la adaptación significa recorrer varios kilómetros para conseguir un balde de agua. En fin, que produce inmensa tristeza pensar que la naturaleza habla mientras el género humano no escucha.

18 de julio de 2008

VANIDAD DE VANIDADES

Publicado en el Diario Útima Hora el 19 de julio de 2008

Derramamos toda la tinta de la corrupción sobre el último de los gobernantes olvidando que éste es apenas el hijo del derrocado Bruto, mas nunca nadie se ha preocupado por deshacerse de todos los hijos de Bruto...

Quien trate de descifrar la caída inminente de las fichas de dominó y sus efectos, es mantenido bajo estricta reserva porque quienes detentan el poder temen hacer conocer la cruda realidad de los hechos. Y es así como los negocios del gobierno transitan por arenas movedizas lo que a su vez provoca el efecto dominó.

El drama del gasoil es apenas un ejemplo de las consecuencias de considerar, desde tiempos inmemoriales, a la empresa estatal PETROPAR y a su antecesora REPSA, como la “caja chica” de los gobernantes de turno. La contratación del flete ha sido el negocio y la preocupación de sus administradores de turno, donde un plan estratégico de aprovisionamiento y reserva de stock, nunca fue prioritario.

Entonces, la percepción de la ciudadanía hoy acerca de que el actual gobierno es el más corrupto y el de la dictadura el de menor exposición al flagelo tiene su respuesta simplemente en la ignorancia de un pueblo al que la clase política le conviene mantenerlo en el olvido y desconocimiento de los hechos. Y es de incultos percibir al gobierno del dictador como el menos corrupto como también será equívoco avistar al actual como el más benevolente.

Ningún gobierno, que se recuerde desde 1954, puede tildarse de impoluto. El dictador y su entorno ha vaciado una y mil veces las arcas públicas. ¿O acaso debe olvidarse aquella acostumbrada respuesta de Alfredo Stroessner a quien osaba solicitar una mejora de su escuálido ingreso como funcionario público? ...”¡vaya y haga su sueldo!” era la orden del tirano. Dicho con otras palabras, ¡vaya y robe pero cuidado con olvidarse de la corona!

Entonces, ¿cual ha sido el factor motivador del cambio en la percepción de la gente sobre la corrupción y sus gobernantes? Simplemente que antes del 2 y 3 de febrero de 1989 los paraguayos vivíamos rodeados de hampones con padrinos disciplinados que tenían como misión distribuir ordenadamente las joyas recogidas por medio del uso y abuso de bienes malhabidos, tanto públicos como privados.

Pero llegó la primavera democrática y con ella también se democratizó la corrupción a tal punto que del pulcro estilo propio de Vito Corleone se pasó rápidamente al desaliñado pistolazo más consustanciado con el bandidaje del viejo oeste americano. Y a eso apunto hoy, a plantear que es lo que ha pasado y está pasando.

Las señales aparecen pero la gran mayoría actúa como si lo que está ocurriendo no tuviera nada que ver con uno mismo. Todo anda muy rápido y vivimos dormidos con los quehaceres de la vida, sin tiempo para reflexionar. Estamos inmersos en la vanidad y olvidamos el pasado, vivimos el presente y no nos preocupamos por el futuro.

No en vano el gran apóstol Pablo de Tarso mencionó en varios pasajes de sus obras “vanidad de vanidades, todo es vanidad”, recurriendo al antiguo testamento (Eclesiastés, capítulo 1, versículo 2). Y es así como se derrama toda la tinta de la corrupción sobre el último de los gobernantes olvidando que éste es apenas el hijo del derrocado Bruto, mas nunca nadie se ha preocupado por deshacerse de todos los hijos de Bruto.

Cuanta falta hace guardar bajo la almohada al “Príncipe” de Maquiavelo y noche a noche disfrutarlo, cuanto menos, con una breve lectura. Quizá nos ayude a pellizcarnos, cuestionarnos y revisarnos, porque algo anormal está acaeciendo.

EL CALLEJÓN DE LA ALIANZA

Publicado en el Diario Útima Hora el 12 de julio de 2008

El organigrama estatal, sin dudas, es el gran rompecabezas de la Alianza y si no se lo diseña convenientemente podría convertirse en su callejón sin salida.

Los gobiernos latinoamericanos se caracterizan por integrar los cargos públicos de alto rango conforme a las propuestas de las organizaciones políticas partidarias. Por tanto, resulta equivocado criticar a la Alianza en el poder a partir del próximo 15 de agosto por la designación de las personas que ocuparán los puestos principales, con base en el llamado “cuoteo político”. Ahora bien, tampoco esta práctica supone nombrar ineptos, incapaces y corruptos.

Lo que se pretende con este modelo de gobierno es que el Estado esté administrado eficientemente y al servicio del bien común, al tiempo de valorar el aporte de las organizaciones políticas y sociales con gentes idóneas y capaces que las represente en el ejercicio de la función pública. A su vez, resulta equivocado que partidos o movimientos reclamen mayor espacio de poder con la ocupación de cargos por el número de votos o afiliados.

Todos los partidos, movimientos y organizaciones aliancistas se encuentran en igualdad de derechos y obligaciones y esta premisa es aplicable también al servicio público de alto rango en la cadena de mando. Entonces, ¿cual es la salida más viable del callejón que llevará al nuevo gobierno al ejercicio del poder y a la administración del Estado en los próximos cinco años?

Sin dudas saber interpretar que: 1) el administrador general del país es el presidente de la República, por mandato constitucional, por tanto principal responsable por las consecuencias de los actos de gobierno; 2) Fernando Lugo Méndez es quien tiene la lapicera y la responsabilidad de designar a las personas que considera capaces e idóneas para que les acompañen en su labor pues en definitiva será el único responsable por las decisiones que aquellas adopten; 3) Los partidos, organizaciones sociales y movimientos políticos tienen el derecho de proponer a quienes consideran idóneos y capaces para que el presidente los designe; 4) El organigrama estatal debe ser funcional y coordinado y, por tanto, Instituciones que se interrelacionan y trabajan juntas, por su finalidad, deben estar dirigidas por personas que sintonicen ideológicamente y cuenten con una visión compartida del rol que les compete cumplir con base en los objetivos que el programa de gobierno determine para las mismas.

Y es así como debería entenderse el porqué de la dimisión de Milda Rivarola como Ministra de Relaciones Exteriores del nuevo gobierno antes de asumir el cargo. Milda, idónea, capaz, culta, no maleable y con carácter, debió estar en sintonía con los titulares de los Entes Binacionales porque éstos integran la política exterior y son estratégicos para los fines de la Alianza. Carlos Mateo Balmelli, también profesional idóneo, capaz, no maleable, con carácter y tan culto como Milda, de quien se dice incluso ejerció la mejor presidencia del Congreso en lo que va del período democrático, designado titular del Ente Binacional Itaipú, no está en sintonía ideológica con la historiadora dimitente, ni comparte quizá la misma visión de Milda sobre la política energética del gobierno aliancista. El organigrama estatal, sin dudas, es el gran rompecabezas de la Alianza y si no se lo diseña convenientemente podría convertirse en su callejón sin salida.

ESPERANZA Y CONFIANZA

Publicado en el Diario Útima Hora el 4 de julio de 2008

La confianza es un valor determinante en la consolidación de un clima adecuado para la recuperación de la economía, para el crecimiento macroeconómico y para la generación de fuentes de empleo.

Hace unos días un amigo, que un par de años atrás decidió radicarse en Madrid huyendo de la malaria económica, me decía en el chat “… veo que está muy movida la cosa, para bien, en el Paraguay; mucha gente nueva y joven en el futuro gobierno; me parece muy agradable; espero que puedan hacer bien sus respectivas tareas… Sí, le respondí, con algunos tropiezos también o pisadas de palitos pero es normal luego de seis décadas…” Al culminar el intercambio de ideas me interrogué si quien abrigaba esperanza y quien expresaba confianza.

Indudablemente, mi amigo Efraín, desde la puerta del sol, entre tapas y tabernas, confiaba en el cambio, sin embargo yo, aquí y muy cercano a la realidad, opté por mantener mis esperanzas en el devenir de días mejores. Elegí no desabrigarme asiéndome fuertemente del tapado de la esperanza, mas guardé cierta cautela y me resistí a entregar un cheque en blanco a la confianza. Y es que la crisis de confianza fue un fantasma que ha recorrido el país y el mundo.

La confianza es un valor determinante en la consolidación de un clima adecuado para la recuperación de la economía, para el crecimiento macroeconómico y para la generación de fuentes de empleo a través de las inversiones que necesariamente deberán provenir de capitales foráneos. Sin dudas el caos económico con su secuela social ha puesto en situación crítica la propia institucionalidad del Estado, porque ha pulverizado su legitimidad como factor detonante de la agonía de un pueblo sumido por muchas décadas en la desesperanza. Las más afectadas, sin dudas, han sido las entidades micro-económicas por el derrumbe y quiebras fraudulentas de entidades privadas, principalmente asociadas al sector financiero.

Entonces, uno de los principales desafíos del gobierno aliancista es recuperar la confianza pública que se ha erosionado y con ella ha desaparecido la seguridad para dar camino transitorio al riesgo que muy pronto cedió su dominio a la incertidumbre y al caos. Es así como se destruyeron organizaciones, se deterioró el crecimiento económico, se envileció el ahorro, la inversión y el empleo, condenando a amplios sectores sociales a la pobreza. Y en la práctica constituyó una expropiación social perpetrada desde las pirámides de las corporaciones multinacionales del capital financiero, de la distribución y de los servicios. Pero resulta paradójico, pues los pactos comerciales condenan a la expropiación como recurso social del Estado, pero ésta resulta válida y aceptada por los gobiernos corporativos contra los intereses de inversionistas, consumidores, usuarios, proveedores, otorgantes de créditos, trabajadores, competidores, estado y sociedad.

En fin, contra el interés del público y en beneficio de los ejecutivos golondrinas que integraron una poderosa élite de opresión. Por eso el próximo gobierno debe acabar con los perimidos conceptos que hacen ver al sector empresarial y ejecutivo como “casta intocable”. Y al tiempo de devolver esperanza debe generar confianza haciendo que cada ciudadano contribuya más con el ejemplo de sus acciones si es que ansía educar en la ética y la moral.

27 de junio de 2008

PARTICIPACIÓN CIUDADANA

Publicado en el Diario Útima Hora el 28 de junio de 2008

La participación ciudadana se hace presente cuando el ciudadano se viste de overol y deja de lado la etiqueta de simple habitante.

Estamos próximos a la asunción de un nuevo gobierno que marcará un cambio radical en la conducción del país luego de seis décadas. Para bien o para mal habrán cambios importantes y, a pesar del escepticismo que causó el anuncio del gabinete de Fernando Lugo Méndez, personalmente confío en los hasta ahora nominados.

Si estoicamente hemos aguantado y soportado seis mil cien días de gracia y de re-contra gracia al hasta hoy unicolor gobierno, porque no otorgar el beneficio de la confianza a quienes conducirán el país desde el 15 de agosto de 2008. Una mirada rápida a la composición del primer anillo del nuevo gobierno nos pone ante una mayoría de pensamiento progresista con marcada tendencia socialdemócrata. Y quienes propulsaron la gestión social como base fundamental para la participación ciudadana deberán ahora rendir cuentas a esa comunidad que debe ejercer un rol protagónico activo y contralor con presión positiva que redunde en el cumplimiento de las promesas electorales.

El control social que se ejerza sobre el próximo gobierno será fundamental y beneficioso si éste quiere hacer historia y no dar lugar tan rápidamente a una nueva alternancia. La participación ciudadana, conocida también como participación política, participación comunitaria o participación civil, se hace presente cuando el ciudadano se viste de overol y deja de lado la etiqueta de simple habitante. O sea, cuando se involucra en la formulación, control y seguimiento de la política pública en su conjunto.

En otras palabras, es un proceso gradual mediante el cual se integra en forma individual o colectiva, en la toma de decisiones, la fiscalización, control y ejecución de las acciones en los asuntos públicos y privados que afecta en lo político, económico, social y ambiental. Y es así como logra no sólo su pleno desarrollo como ser humano sino también contribuye al de la comunidad toda.

Entonces, la participación ciudadana se vuelve una herramienta efectiva y útil en la conformación de estrategias que conllevan al desarrollo económico. Y su gran importancia radica precisamente en la comprensión de la naturaleza de la participación como vía para buscar solución a problemas tales como: efectividad en la gestión pública, resolución de problemas comunitarios y eficiencia del gasto público.

Por eso, con participación y gestión social será posible encontrar a las tres dimensiones de la ciudadanía jugando un papel importante para el éxito del nuevo gobierno: la ciudadanía civil, asociada a los derechos propios de la libertad individual; la ciudadanía política que se sustenta en los principios de la democracia liberal del derecho a la participación de ser elector y ser elegido y la ciudadanía social que se refiere a los derechos a la salud, a la educación, la vivienda, a la seguridad social, sobre los que se constituye y expande el estado de bienestar en los países del mundo occidental.

26 de junio de 2008

¿Y SI VUELVEN?

Publicado en el Diario Útima Hora el 21 de junio de 2008

La oposición próxima a gobernar debe preocuparse de la delicada situación del emigrante en lugar de ocuparse vanamente del juramento como Senador electo de Nicanor Duarte Frutos.

Para ilustrar ciertas realidades no hay nada mejor que los cuentos. Recuerdo que en rueda de amigos a alguien se le ocurrió plantear distintos escenarios ante la utópica posibilidad de declarar la guerra a los EEUU. Pero hete aquí que quien hizo tal planteamiento cerró la ronda con la pregunta ¿y si ganamos? Se dio por terminada la tertulia, como siempre sin respuestas. Y es lo bueno de las discusiones utópicas que también sirven de vitaminas para el cerebro. Pero en política generalmente se recurre a las utopías con otros propósitos.

Es así como con promesas fatuas o con propuestas impensables de ocurrir se intenta persuadir o convencer al electorado. En las pasadas elecciones nacionales un caballito de batalla de la oposición hoy convertida en gobierno fue el tema de la migración. Y dada su sensibilidad, porque afecta fundamentalmente a la familia como núcleo central de la sociedad, en nombre del éxodo o exilio económico se hicieron muchas promesas.

Desde aquella frase del P Más “que se vayan todos” hasta las propuestas del retorno al trabajo digno en su patria. Es así como se sucedieron las visitas de los candidatos a la Argentina como a países europeos, con énfasis en Buenos Aires y Madrid, principales capitales que albergan a más del millón de paraguayos. Las propuestas coincidentes se centraron en dos aspectos: asegurar una reforma constitucional que permita el voto de los residentes en el exterior y la generación de fuentes de empleo para un regreso digno.

Pero inesperados acontecimientos, por su rápida ocurrencia, ahora nos convoca a una nueva tertulia para intentar contestar la interrogante ¿y si vuelven? Y es que se hace cada vez menos posible la permanencia de un buen contingente de compatriotas en el exterior. Esta realidad a largo plazo en campaña electoral hoy es un clamor inmediato. Esta cuasi utopía un par de meses atrás hoy urge respuesta. Y será el nuevo gobierno quien tendrá que remangarse y buscar soluciones no sólo al retorno de los compatriotas sino a la merma prevista en la remesa de divisas para el próximo quinquenio.

La crisis hipotecaria norteamericana con sus consecuencias en el negocio inmobiliario y de construcciones en España, la actual confrontación político-empresarial argentino por la imposición de tributos a la exportación de productos agrícolas y la reciente ley del parlamento europeo que provocará un escape masivo de los inmigrantes ilegales, son sucesos que apuran el cumplimiento de promesas en un término demasiado menor al esperado y con remota posibilidad de aceleración de la economía que permita el crecimiento del empleo.

La clase política y, en especial, la oposición próxima a gobernar debe preocuparse de la delicada situación del emigrante en lugar de ocuparse vanamente del juramento como Senador electo de Nicanor Duarte Frutos. Al final, si quieren actuar con seriedad, que juzguen políticamente, en su debido momento, no sólo al renunciante Presidente sino también a quienes a través de los recovecos de la Justicia permitieron su postulación. Hoy importan mucho más aquellos náufragos ... ¿de la utopía?

17 de junio de 2008

CRISIS INSTITUCIONAL

Publicado en el Diario Útima Hora el 14 de junio de 2008

Es el funcionamiento institucional de un país el que determina su nivel de riesgo y su aptitud para superar el examen internacional de la competitividad

No hay que buscar en la economía a la culpable de todos los males ni dedicarla el logro de metas apropiadas. Es el funcionamiento institucional de un país el que determina su nivel de riesgo y su aptitud para superar el examen internacional de la competitividad. “No es la economía, estúpido” es una famosa frase atribuida a Bill Clinton quien la habría pronunciado en su campaña electoral. En ella el ex presidente norteamericano resaltaba la importancia que para los votantes americanos tenía la marcha de la economía.

Pero es de miopes pensar que la raíz de nuestro problema es económica. Por el contrario, es la debilidad institucional la que afecta a la economía y determina la pobreza del desarrollo. La falta de credibilidad en los Poderes del Estado es otra manifestación de la crisis institucional cuya responsabilidad es atribuible a toda la clase dirigente y no sólo a la política. Y esto es así porque no debe perderse de vista que siempre hay “alguien” que financia a los políticos.

El nuevo gobierno que asumirá el 15 de agosto próximo debe ser conciente que recibirá un país institucionalmente deteriorado y debilitado, hecho que repercute en la economía y condiciona su desarrollo. Y no hay posibilidad alguna de desarrollo económico, definido éste como crecimiento más promoción humana, sin una reconstrucción institucional previa.

Ejemplos sobre la crisis de debilidad institucional sobran: como el de atribuir el problema a la inflación cuando el mal radica en la gran mayoría que la convalida y acepta que se mienta acerca de ella por intereses de corto plazo; o el de la educación escolar básica donde la escuela pública hoy ofrece una calidad educativa considerablemente inferior a la de la educación privada. Otro gran parásito que debilita instituciones es la forma de concebir el poder, al punto que quienes lo detentan se han enamorado tanto de él que no lo perciben como un medio para mejorar las condiciones de vida de sus semejantes sino como un fin en si mismo.

Entonces los agentes políticos encuentran motivación cuando, junto a su clan familiar, acceden y se perpetúan en él. Es así como en el Congreso y en las Juntas Municipales y Departamentales se han impuesto las “dinastías”. Cónyuges, hijos y hermanos se suceden o comparten el poder. Así la sangre fue desplazando a la meritocracia intelectual. Pero no solo la clase política es responsable. Lo soy yo también por mi temor a decir muchas veces lo que pienso. Cada uno sabrá el propósito de su silencio cómplice. Ese callar que otorga poder y hasta impunidad. No aplaquemos nuestro anhelo de un país mejor. La calidad institucional debe preocuparnos. No solo por una cuestión ética sino porque de no hacerlo, a mayor o menor plazo, seremos “castigados” por nuestro silencio.

8 de junio de 2008

BAJO SOSPECHA

Publicado en el Diario Útima Hora el 7 de junio de 2008

La dupla presidencial que asumirá la gestión gubernativa del país el próximo 15 de agosto se encuentra bajo sospecha…

Mucho antes del inicio de la cuenta regresiva de los cien días de gracia, se vislumbran oscuros nubarrones que anuncian tempestades al flamante gobierno electo el 20 de abril. Les anunciaba en una nota anterior que el primer examen de la dupla Lugo-Franco serían la forma de integración del gabinete y los mecanismos de incorporación y desvinculación de las personas en la administración pública. Recuerdo que en rueda de prensa el senador liberal Juan Carlos Ramírez Montalbeti afirmó que se pondrá cuidado en el mecanismo de selección del personal público y para cumplir con este anuncio señaló que se convocará a concurso de oposición.

Era lo propio y no se podía expresar lo contrario en coherencia con el discurso aliancista en campaña electoral. Además, era lo mínimo de esperar de quienes desplazaron del poder a los colorados luego de 61 años de prebendas y abusos en la administración pública donde los cargos se cubrían según las necesidades políticas partidarias más no conforme a la capacidad e idoneidad del servidor ni a la necesidad de la Institución. Hasta el presidente electo envió tranquilidad n los funcionarios estatales al asegurarles que serán confirmados los capaces e idóneos y que se preocupen sólo aquellos que no cumplen ni justifican sus funciones.

Pero hete aquí que pisaron el palito tanto Fernando Lugo como Federico Franco. Mal por donde se lo mire. Y es que Lugo y Franco no estaban ajenos a las enardecidas miradas de los colorados y de aquellos que no apostaron a la Alianza como contralores permanentes y al acecho del más mínimo error, en cada paso, en cada acción, en cada declaración. Pero la serpiente venenosa logró su objetivo al poner en el camino familiar de la electa dupla presidencial -¿cuándo no?- las frutas prohibidas del poder y del jugoso beneficio económico del que gozan los privilegiados asalariados de las Entidades Binacionales. Y las masticaron hasta deglutir.

Tremendo error, metida de pata o no se que el de incorporar a las Entidades Binacionales a parientes extremadamente cercanos de Lugo y Franco. Y para mal de males en estas Instituciones donde los que dejan el Gobierno han utilizado la mala praxis de ofrecer cupos políticos subastando cargos a “Seccionaleros & Co.”. Y que la embarren más. Por tanto no deben Lugo, Franco, ni nadie del entorno primario ni familiar, seguir pisando palitos ni cascarones bananeros con declaraciones como que no sabían lo ocurrido con dichos nombramientos. Como tampoco Fernando Lugo debe esquivar el bulto aduciendo desconocimiento y no responsabilidad sobre el tema.

Esto es muy delicado, salvo que se pretenda diluir con mayor rapidez que el alcanfor la esperanza de cambio. Un cambio que se sabe no llegará a concretarse en general en cinco años porque un quinquenio no basta para corregir errores de seis decenios. Pero seguir cometiendo las mismas equivocaciones es una dura señal de que el cambio no se encuentra en el libreto del nuevo Gobierno y de ser así, constituirá un duro golpe a un pueblo que se jugó por un país diferente. De momento la dupla presidencial que asumirá la gestión gubernativa del país el próximo 15 de agosto se encuentra bajo sospecha.